Jesús obra con autoridad

Lunes 10/01/2022

Este domingo, el Servicio Divino de palabra fue realizado por el Apóstol Herman Ernst. Estuvo acompañado en el servir por el Pastor Rolando Pontet.


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Servicio Divino de palabra – Domingo 9 de enero de 2022

Tema: Encuentro con Cristo

Jesús obra con autoridad

Texto bíblico: Mateo 7:28-29: “Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.”

Mensaje: Confiamos en la autoridad de Jesucristo.

Las enseñanzas de Jesús causaban un gran impacto entre sus contemporáneos. En Cristo, la autoridad divina se destacaba. Su doctrina era toda una novedad. “Ahora el trino Dios estaba presente entre los seres humanos y les quería mostrar las cosas tal como eran”, señaló el Apóstol en los primeros minutos de su prédica.

Jesús enseña con autoridad
En aquella época, muchos creyentes creían que gozar de una buena salud, una posición económica favorable y el prestigio social eran signos de que Dios los estaba bendiciendo por cumplir la ley mosaica. No obstante, cuando Cristo vino a la tierra se dirigió a los pobres y a los despreciados o marginados por la sociedad.
Lo que Jesús enseñaba era que la gracia de Dios no se demostraba en la prosperidad terrenal, sino en la salvación que ofrecía a todos los seres humanos. “No queremos acercarnos al Señor para que no nos falte el dinero y la salud. La gracia de nuestro Padre celestial va mucho más allá y no se mide por las situaciones que nos toque pasar”, expresó el Apóstol.

Confiamos en la autoridad de Jesús
“Queremos entregar nuestro corazón y confiar en el Señor”, subrayó el siervo en relación al siguiente punto del Servicio Divino.
Podemos creer en la autoridad de Cristo porque nos demuestra su amor con la posibilidad de salvación que nos ofrece. Es por ello que no precisamos que venga a hacer milagros. Confiamos en su palabra y no en nuestra experiencia. Queremos obedecer la voluntad de Dios no por temor, sino por amor.

Lo que Jesús irradia
Jesús irradiaba una fuerza especial que impactaba a muchas personas. Hay varios ejemplos de esto. ¿Cómo lo lograba?
*Por la intensa comunión que tenía con su Padre. “Se ocupaba de que la relación con Él fuera perfecta”, afirmó el Apóstol.
*Por su amor al prójimo. Siempre intercedió por todos.
*Además, le daba importancia a la misión que Dios le había dado.

Lo que nosotros irradiamos
“Deberíamos preguntarnos cómo es nuestra situación en relación a estos rasgos que caracterizaban a Cristo”, mencionó el Apóstol, llamando a la reflexión de cada uno.
Cuando las personas nos observan también deberían percibir en nosotros:
*Nuestra comunión con Dios.
*El amor hacia el prójimo.
*Y la importancia que le damos a nuestra misión.

“El Señor quiere que podamos entregar nuestro corazón y que cumplamos nuestra misión con alegría y dedicación. Seamos verdaderos discípulos de Cristo”, exhortó el Apóstol sobre el final de la hora.

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