“¡Glorificamos al Creador!”

En el marco de la visita del Apóstol Mayor a Argentina, el sábado 1º de abril tuvo lugar una presentación musical en la iglesia central Buenos Aires, a cargo del coro general y la orquesta estable de Argentina.

En la intensa agenda de actividades del Apóstol Mayor en su visita al país, formaba parte esta presentación musical. A las 19 horas en punto todos los presentes le daban la bienvenida cantando a viva voz “Con un corazón alegre, gracias damos al Señor”, mientras ingresaba el Apóstol Mayor junto a sus acompañantes: los Apóstoles de Distrito L. Kolb (EE.UU), Raúl Montes de Oca (Brasil), R. Storck (Renania del Norte-Westfalia, Alemania) y Mark Woll (Canadá) y los Ayudantes Apóstol de Distrito F. Dzur, J. Fendt y J. Sobottka, así como nuestro Apóstol de Distrito E. Minio y los Apóstoles del área.

Los 60 instrumentistas y 150 coreutas abordaron un repertorio preparado especialmente bajo la temática: “Glorificamos al Creador y le alabamos con los dones que nos regaló”, en alusión al lema dado por el Apóstol Mayor para este año, “Gloria a Dios, nuestro Padre”.

Entre los 1.372 concurrentes, estaban presentes todos los dirigentes de distrito del área. Por ello, en sus palabras introductorias el Apóstol Mayor se dirigió especialmente a ellos y aprovechó para expresarles su gratitud por todo el trabajo, ayuda y entrega. Y agregó: “Es muy lindo que el concierto esté ligado con el sentir de glorificar a Dios”, manifestando que no sólo es cuestión de enseñárselo a los demás, sino que los portadores de ministerio son los primeros que deben hacerlo. Y si bien la tarea de misión requiere mucho esfuerzo y sacrificio, invitó a evocar más bien a Jesús que a lo personal, a hablar más de la gracia de Dios. “¡Seamos los primeros en glorificar a Dios! Les digo que vale la pena hacerlo…” expresó.

A continuación tuvo lugar la bella y emotiva presentación coral e instrumental de nueve obras, con un recorrido temático que evocaba la glorificación y agradecimiento a Dios.

Luego del impactante cierre con el conocido “Die Himmel erzählen die Ehre Gottes” (Los cielos cuentan la gloria de Dios), de Joseph Haydn, el Apóstol Mayor ocupó nuevamente el altar y expresó la necesidad que tenía el alma de agradecer. Y en lugar de hacerlo con un aplauso u otra forma efusiva, invitó a toda la concurrencia a ponerse de pie y mantener unos instantes de silencio a modo de agradecimiento, mientras con su mirada recorría a cada coreuta e instrumentista: un momento sumamente conmovedor que seguramente quedará imborrable en el alma de cada uno de los presentes.

Luego de la oración final se despidió ya esperando todos el Servicio Divino del día domingo, tan anhelado por los fieles ya que será transmitido a toda la INA Sud América por imagen y sonido.