“Yo te he puesto por atalaya”. Reunión para el área de enseñanza y escuelas de música

El sábado 18 de marzo de 2017, a las 17 hs, en la iglesia central Buenos Aires el Apóstol de Distrito Enrique Minio presidió una reunión para los maestros de los distintos niveles de enseñanza de religión, invitando también a los docentes de las escuelas de música.

El texto bíblico utilizado para la ocasión se puede leer en Ezequiel 3:17: “Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte”.
Después de desear una cordial bienvenida a los allí presentes y también a los lugares que recibían la reunión por transmisión satelital, el Apóstol de Distrito Minio compartió algunos pensamientos dirigidos especialmente a la tarea de los maestros en cada comunidad. Comparó la actividad con la de un portador de ministerio previo a un Servicio Divino.
El Apóstol Mayor también había enviado a través suyo los saludos y su gratitud a las hermanas y los hermanos por la tarea ya realizada y por la que ha de venir, deseando que puedan vivir muchas alegrías trabajando para Dios.
En referencia a texto el Apóstol explicó que el atalaya era el centinela, que estaba en un lugar elevado para advertir de los peligros. Ese lugar especial no era un espacio de privilegio o de poder, sino de responsabilidad.
Del mismo modo, los maestros son “atalayas”, que acompañan a los padres en la preparación espiritual de sus hijos. Su misión es colocar el Evangelio de Cristo en el corazón. “No somos el modelo nosotros, el modelo es Cristo”, expresó.
Como herramientas del Señor debemos sortear algunos peligros. El primero es perder el amor a Dios. Realizar a cabo una tarea en su casa, es una manera de agradecer a Dios. El segundo peligro es perder el amor al prójimo. Y el tercero, es la falta de humildad.
Que los niños puedan comprender quién es Dios, conocerlo como un Dios de amor, no coercitivo. También ser compresibles y creíbles, con el ejemplo más que con palabras.

Colaboraron en el servir el Apóstol Gerardo Zanotti, los Obispos Claudio Gonzalez y Leonardo Berardo.
El coro que enmarcó la reunión estuvo conformado por maestros de la escuela de música y colaboradores.
Fue una valiosa hora de enseñanza, previa al comienzo del ciclo lectivo que tendría lugar en los días siguientes.