70º Aniversario de la comunidad Ecilda Paullier

La ciudad de Ecilda Paullier se encuentra al suroeste de Uruguay, en el departamento de San José, en el límite con el departamento de Colonia y cuenta con una población aproximada de 3000 habitantes. Es una pequeña colonia agrícola fundada en 1883 por inmigrantes de diversas nacionalidades europeas, principalmente franceses, suizos, alemanes y españoles.
El 30 de diciembre de 2015 en la pequeña iglesia Ecilda Paullier el Apóstol Herman Ernst realizó un Servicio Divino en el que se conmemoraron los 70 años del inicio de la comunidad nuevoapostólica en esta ciudad. Lo acompañaron el Evangelista de Distrito Sergio Maya, los Primeros Pastores Andrés Pontet y Leonel Navarro y siervos de la comunidad.

Los primeros pasos. El Apóstol Ernst hizo referencia a los comienzos de la Obra de Dios en la ciudad, en el año 1944. Por esos tiempos algunos que vivían en la cercana ciudad de Nueva Helvecia (a 22 km) tenían familiares en Ecilda Paullier. Ellos llevaron el testimonio de la fe nuevoapostólica a la familia Alonso. En su hogar se realizaron las primeras reuniones. El primer Servicio Divino fue el 30 de diciembre de 1945. Años más tarde y con el crecimiento de la comunidad, sería inaugurada la iglesia, el 7 de junio de 1969, por el Apóstol de Distrito Federico Lewitus.

Servicio Divino. Para esta ocasión los miembros de la comunidad engalanaron muy festivamente la iglesia acorde al evento, al que pudieron asistir un total de 97 fieles. El texto bíblico utilizado por el Apóstol fue Salmos 95:6-7: “Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor. Porque él es nuestro Dios; nosotros el pueblo de su prado, y ovejas de su mano”.
El Apóstol Ernst en su prédica profundizó el texto bíblico de ese día, definiendo el concepto de “adorar” como amar en extremo o profundamente. Exhortó también a colocar a Dios en el centro de nuestra vida, reconociendo que Él puede cambiar todas las cosas en un instante y permitiendo que sea hecha su voluntad y no la nuestra. Así lo estaremos adorando y lograremos cambios profundos desde el interior de nuestra alma.
Colaboraron en el servir el Evangelista de Distrito y los dos Primeros Pastores.
Finalizado el Oficio, todos compartieron un refrigerio con una gran torta de aniversario. Realizaron el primer corte junto al Apóstol Ernst las hermanas Edelma y Elsa Alonso, hijas de aquellos pioneros que abrieron su casa para la entonces nueva comunidad. Y así como hace 70 años, la alegría y el agradecimiento fueron los sentimientos que iluminaban los rostros de todos los presentes.