La luz de nuestras obras

Durante el último fin de semana de octubre, el Apóstol Pablo Basso visitó comunidades en Entre Ríos (Argentina). El sábado 26, presidió un Servicio Divino en la iglesia San Salvador y al día siguiente, en Concordia.

Jesús es nuestra luz
El primero de los Servicios Divinos se desarrolló el sábado 26, por la tarde, en la iglesia San Salvador. Los miembros de la comunidad esperaban con alegría la visita del Apóstol, ya que había pasado un año desde su último encuentro. Se congregaron 59 fieles.
La prédica se basó en el texto bíblico de Isaías 9:2: “El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos”.
“El Servicio Divino no termina aquí. Continúa al salir de la iglesia. Es allí cuando tenemos que ayudar al prójimo, mostrándole el camino a la salvación a través de la luz de nuestras obras”, manifestó el Apóstol durante su servir.

Preparación
A la mañana siguiente, el Apóstol Basso compartió la preparación para el Servicio Divino en ayuda para los difuntos junto a los fieles de la iglesia Concordia. Participaron del encuentro 67 invitados.
El servir se basó en la palabra del día, Mateo 5:16. “Rogamos por la salvación de los difuntos”, fue la premisa de la prédica. El Apóstol nuevamente destacó la importancia que tiene para la vida permitir que luz de Cristo alumbre nuestro camino y el del prójimo.
Asimismo, en el marco de la hora celebrada, el Pastor Juan Tononi fue colocado en estado de descanso ministerial.
De esta forma, finalizaba la visita a esta zona de la provincia de Entre Ríos, con muchas alegrías vividas y abundante bendición.