La esencia es la fe

Venado Tuerto y Granadero Baigorria son dos localidades del sur de la provincia de Santa Fe (Argentina). Allí, nuestros hermanos y hermanas compartieron horas de alegría junto al Apóstol de Distrito Enrique Minio y el Apóstol Néstor Manzelli.

Los miembros de ambas comunidades esperaban a los siervos con mucha expectativa. En Venado Tuerto, la visita del Apóstol de Distrito inicialmente había sido planificada para septiembre del año pasado, siendo luego reprogramada para esta fecha. En el caso de Granadero Baigorria, sería el primer encuentro con este siervo luego de su reinauguración, en julio de 2022.

Esencia
El sábado 15 de abril, el Apóstol de Distrito ofició en la iglesia Venado Tuerto. La palabra se basó en el texto bíblico de 2 Corintios 5:7: “Porque por fe andamos, no por vista”. “La fe es la esencia de nuestra relación con Dios. Si bien nos dirigirnos a Él cuando tenemos alguna necesidad material, hacerlo solo por esto podría llevarnos a tener algunas desilusiones”, explicó el siervo al inicio de la hora. “Nuestro Padre celestial nos ama bajo cualquier circunstancia. Queremos confiar en Él y ser pacientes”, agregó luego.
Para este día se sumaron voces al coro de la comunidad y miembros del Coro Municipal de la ciudad participaron del Servicio Divino como invitados.

Una comprensión más profunda
Al día siguiente, el Apóstol de Distrito Minio y el Apóstol Manzelli compartieron el Servicio Divino dominical junto a los fieles de la comunidad Granadero Baigorria. También participaron hermanos y hermanas de Puerto San Martín. Para esta ocasión, el Apóstol de Distrito basó su servir en la palabra prevista para ese fin de semana, Marcos 16: 14.
Durante su prédica, el siervo explicó que de acuerdo a lo que experimentamos, generamos nuestra percepción del mundo y de Dios. Luego, a partir de esto, actuamos de determinada manera. Cuando no lo hacemos con las herramientas que el Señor nos da, nuestra reacción podría ser un obstáculo para la salvación del alma. “La fe es lo que nos permite tener una comprensión más profunda de Dios y del mundo”, señaló unos instantes después.
Luego de la festiva hora, los hermanos y hermanas que participaron del Servicio Divino se dirigieron al jardín de la iglesia para compartir un refrigerio. Allí fue colocada una pequeña mesa de madera y los siervos que visitaron Granadero Baigorria fueron invitados a firmarla. El Apóstol de Distrito, con sorpresa y una sonrisa, fue el primero en hacerlo.