Soberano en nuestro corazón

Viernes 30/09/2022

Durante el último fin de semana de septiembre, el Apóstol de Distrito Enrique Minio realizó Servicios Divinos en dos iglesias de Uruguay. El sábado 24 compartió la hora junto a hermanos y hermanas de la comunidad La Paz y, al día siguiente, ofició en El General.


Discípulos de Cristo
“Aguardamos la llegada del Apóstol de Distrito con muchos ruegos y alegría”, expresaban miembros de La Paz (departamento de Colonia) antes del Servicio Divino: el sábado 24 de septiembre de 2022 quedaría guardado como un recuerdo especial en la historia de la comunidad.
La prédica se basó en el texto bíblico de Apocalipsis 22: 12: “He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra”.
“La recompensa de la gracia de Dios es una promesa que se basa no en nuestros buenos resultados, sino en los esfuerzos de intentar cada día ser discípulos de Cristo”, destacó el Apóstol de Distrito durante su prédica. “La palabra nos invitó a tener siempre presente la certeza de que Jesús vendrá a buscar a su pueblo”, recordaba también un hermano que participó de esta hora.
Al finalizar el encuentro, el siervo saludó a los 34 invitados. Entre ellos, alegró también la presencia del Apóstol de Distrito (en descanso) Raúl Montes de Oca.

El reino de Dios se hace visible
Otra de las comunidades nuevoapostólicas ubicadas en el departamento de Colonia es El General. Allí el Apóstol de Distrito ofició el domingo 25 de septiembre por la mañana. Asistieron 68 invitados, dos de los cuales conocían la Iglesia ese mismo día.
En esta oportunidad, el texto bíblico utilizado fue una parte de Lucas 11: 2, que forma parte del Padre Nuestro, “Venga tu reino”. “Dios prometió volver y eso es lo que esperamos cuando decimos este ruego”, explicaba el Apóstol de Distrito. Esperamos el cumplimiento de su promesa y nos preparamos para ello. “El Padre celestial desea que podamos amarlo, pero no nos obliga a hacerlo. Para ello nos pide que cambiemos algunos hábitos y que Cristo sea el soberano en nuestro corazón. Para conseguirlo, debemos esforzarnos cada día”, manifestó luego.
Antes de finalizar la hora, el Apóstol de Distrito tenía una palabra más para compartir con los hermanos y hermanas de El General: “Dejemos que Dios gobierne en su iglesia y en nuestro sentir”. Luego saludó con alegría a todos los presentes.

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