Lunes 22/08/2022
"Dios se revela a los seres humanos de diversas maneras para darles a conocer su voluntad", fue el mensaje del Servicio Divino dominical, que por transmisión fue realizado por el Obispo Javier Ávalos. Lo acompañó en el servir el Anciano de Distrito Jorge Segarra.
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Servicio Divino de palabra – domingo 21 de agosto de 2022
Tema: Dios se muestra
Dios estaba en el fuego
Texto bíblico: Éxodo 3:2: “Y se le apareció el Ángel de Jehová en una llama de fuego en medio de una zarza; y él miró, y vio que la zarza ardía en fuego, y la zarza no se consumía”.
Mensaje: Dios se revela a los seres humanos de diversas maneras para darles a conocer su voluntad.
El Padre celestial se revela a los seres humanos de distintas formas. Muchos relatos de la Biblia atestiguan algunos de sus encuentros. Si bien cada uno tenía sus propias características, todos mostraban algo en común: Dios quería manifestar su voluntad.
“Hoy nuestro Padre tiene algo para decirnos. Depende de nosotros escucharlo. Para eso, debemos abrir nuestro corazón”, aconsejó el Obispo al inicio de la hora. “Dejémonos sorprender por la manifestación divina. Tal vez no podemos ver su rostro, pero sí escuchar su voz”, agregó luego el siervo.
Dios se manifiesta de diversas maneras
El profeta Elías fue una de las personas que tuvo un encuentro con el Señor. En el monte Horeb, se le apareció en un silbo apacible y delicado. De esta forma le brindó indicaciones sobre el camino que le restaba recorrer.
El Señor también se reveló al pueblo de Israel. Mediante una columna de nube de día y otra de fuego por la noche, los guiaba a la tierra prometida.
Nuestro Padre celestial utilizó además ángeles para comunicarse con los seres humanos. Por ejemplo, fue de esta forma como María supo que sería la madre de Jesús.
El fuego como señal de la presencia de Dios
La cita bíblica para este día narra el momento en que el Señor se le aparece a Moisés en una zarza ardiente. Podemos identificar en este suceso dos factores fundamentales. Por un lado, el elemento natural del fuego. Por el otro, la palabra. Con ese encuentro, Dios anunció a Moisés su voluntad de liberar de la esclavitud a su pueblo escogido.
El fuego, señal del Espíritu y del juicio
Pero esa no sería la única vez en que Dios se manifestase mediante el fuego. El relato del derramamiento del Espíritu Santo en Pentecostés hace referencia nuevamente a este elemento de la naturaleza. Las lenguas de fuego que descendieron sobre los Apóstoles eran signo del poder y de la presencia de Dios. El fuego también es un importante símbolo del juicio divino.
El fuego del Espíritu Santo arde también hoy
Nuestro Padre celestial envió a su Hijo para nuestra salvación. El ser humano pudo ver, oír y tocar a Jesucristo. Luego, el Señor envió el Espíritu Santo. A partir de ese momento, los seres humanos pueden recibir todo lo necesario para la redención y “a través de Él, podemos comprender la voluntad del Señor”, destacó el Obispo. Además, el Espíritu Santo nos orienta para que podamos dirigir nuestra mirada a Cristo y hacia su retorno. Nos purifica, para alcanzar la dignidad. También nos consuela y ayuda en las aflicciones. Entonces queremos mirar hacia adelante con valor y confianza. “Dejémonos iluminar, entusiasmar y acompañar por el fuego del Espíritu Santo”, exhortó el Obispo sobre el final de la hora.
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