Viernes 25/03/2022
“La realidad es que no hay palabras para el agradecimiento… Pero el hecho de no encontrarlas no significa que no estén en el corazón, sino que queremos también colocarlas a los pies del altar”. Con este sentir y en el envío del Apóstol Mayor, el Apóstol de Distrito Enrique Minio colocaba en estado de descanso ministerial al Obispo Fernando Altare, después de 46 años de actividad. Fue en el marco del Servicio Divino realizado el domingo 20 de marzo de 2022 en la Iglesia central Buenos Aires.
Fe y esperanza
El Apóstol de Distrito estuvo acompañado por todos los Apóstoles y Obispos de Argentina. Participaron de la hora 534 fieles. Asimismo, las comunidades del área del Obispo Altare pudieron ser parte del Servicio Divino ya que fue transmitido en vivo a través de Internet.
La prédica estuvo basada en el texto bíblico de Hebreos 4: 14-15: “Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.”
“El autor de la carta quería colocar certeza en el corazón del pueblo, porque había perdido la esperanza y se estaba deteniendo en el camino. Buscaba fortalecer la fe, ya que es necesaria para la salvación. No obstante, no alcanza solo con esto. También es necesario mantener una esperanza fuerte y viva”, dijo el Apóstol de Distrito al inicio de la hora.
No te detengas
Sintamos el amor de Dios en nuestro corazón y no dudemos de ello. Cristo nos exhorta a que no nos detengamos e intercede por nosotros. Quiere ayudarnos, Él es nuestro camino y modelo. Queremos decidirnos por Él una y otra vez. No importa si en el intento nos equivocamos, lo importante es seguir luchando contra el mal. “Que Jesucristo siga siendo nuestra profesión y refugio”, destacó el Apóstol de Distrito.
Colaboraron en el servir los Apóstoles Claudio González y Gerardo Zanotti. A continuación, la comunidad compartió la Santa Cena. El Sacramento fue también dispensado para los difuntos, participando el Obispo Altare y el Evangelista de Distrito Frisardi en representación. “Hoy aquí hay muchos más invitados de los que podemos ver”, expresó el Apóstol Jorge Franco desde el altar, en la alocución previa a este sentido acto.
“Y no he visto justo desamparado...”
“Solo tengo palabras de agradecimiento a todos los siervos, hermanos y hermanas, porque sin ellos nada habría sido posible”, manifestó el Obispo Fernando Altare cuando fue invitado a ocupar el altar por última vez.
Luego de 46 años de actividad ministerial, de los cuales 27 fueron como Obispo, llegaba el día de ser colocado en descanso. Por más de 12 años activó en iglesias del noroeste argentino y por eso estaba muy feliz por poder compartir la hora con seres queridos y algunos siervos de varias de esas provincias.
"Durante toda mi vida el Padre celestial me ha sostenido y sé que así será siempre”, afirmó el Obispo antes de compartir con todos los presentes el texto de Salmos 37: 23-25: “Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, y él aprueba su camino. Cuando el hombre cayere, no quedará postrado, porque Jehová sostiene su mano. Joven fui, y he envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan”.
Finalmente, durante esta hora celebrada el Evangelista de Distrito Luciano Frisardi recibió el nombramiento de Obispo y el Primer Pastor Daniel Guastadisegno, el encargo de Dirigente de Distrito.