“Una necesidad del alma”

Los hermanos y hermanas de Mendoza (Argentina) vivieron un fin de semana especial. El sábado 18 y domingo 19 de septiembre, el Apóstol de Distrito Enrique Minio, el Apóstol Guillermo Canessa, el Obispo Marcelo Boggio y dirigentes de distrito realizaron Servicios Divinos en diversas comunidades de la provincia.

Alegría multiplicada
El sábado se realizaron los primeros encuentros en diferentes iglesias de Mendoza. El Evangelista de Distrito Enrique Calvo visitó la iglesia Tunuyán y el Evangelista de Distrito Gerardo Mancini ofició en Guaymallén. Por su parte, el Anciano de Distrito Alejandro Caracciolo estuvo junto a los fieles de Palmira; el Apóstol Canessa realizó el Servicio Divino en Luján de Cuyo y el Apóstol de Distrito Minio presidió la hora en la iglesia San Martín.

En esta ocasión, fue Filipenses 2: 10-11 el texto bíblico que el Apóstol de Distrito utilizó para su servir: “Para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre”.

“Estar aquí es una gracia especial, una necesidad del alma. Porque no venimos a la iglesia para vivir un encuentro social, sino con el deseo de colocar nuestro corazón en lo que Dios quiere decirnos”, expresó al inicio de la hora.
Luego, en relación al pasaje bíblico citado, explicó que confesar a Cristo significa apropiarnos de su palabra y de lo que podemos aprender de su vida. “Para ello, Dios no nos pide que seamos perfectos, pero sí que podamos luchar para dejar de lado el viejo ser”, agregó. “Que podamos siempre confesar a Cristo, porque esto forma parte de los elementos de la fe”, destacó también el Apóstol de Distrito.

“Sin fluctuar”
Al día siguiente, los siervos antes mencionados participaron juntos del Servicio Divino en la iglesia Mendoza. Además, en esta oportunidad entre los invitados pudieron estar siervos en descanso, viudas de siervos y maestros del área de enseñanza.

El Apóstol de Distrito sirvió bajo el texto bíblico de Hebreos 10: 23: “Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió”.
“¿Qué herramientas tenemos para mantenernos firmes?”, preguntó al comienzo para luego enseguida compartir con la comunidad algunas respuestas: “En primer lugar, cultivar la comunión. Esto implica amarnos tal como somos. Luego, buscar a Cristo en el servir, es decir, entregar nuestro corazón. Es hermoso cuando podemos lograr la comunión aun en las diferencias”.

Por otra parte, en el marco de esta visita el Apóstol de Distrito informó a los fieles del lugar acerca de una restructuración en la atención del área, la cual estará a cargo del Evangelista Gerardo Mancini, con la colaboración de otros siervos de distrito.
“En cada una de las comunidades se compartieron momentos de profunda alegría, ¡una verdadera fiesta para el alma! Momentos que perdurarán para siempre en el corazón”, expresaron portadores de ministerio de Mendoza a modo de conclusión por todo lo vivido.