Por el sur de la provincia de Buenos Aires

Viernes 01/02/2019

Los días viernes 1º y sábado 2 de febrero de 2019, el Apóstol de Distrito Enrique Minio visitó las comunidades de Coronel Pringles y Coronel Suárez Nº 2, en el sur de la provincia de Buenos Aires.


Coronel Pringles: nuevo lugar de reunión
La ciudad de Coronel Pringles se encuentra a unos 500 km de la ciudad autónoma de Buenos Aires. En el marco de la visita del Apóstol de Distrito del viernes 1º de febrero, los 46 concurrentes compartían la alegría de inaugurar el nuevo lugar de reunión para los Servicios Divinos.
Para esta hora, el Apóstol de Distrito tomó como base el texto de Salmo 43: 3 y parte del 4: “Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán; me conducirán a tu santo monte, y a tus moradas. Entraré al altar de Dios, al Dios de mi alegría y de mi gozo”. Al comenzar, el Apóstol de Distrito expresaba su alegría y agradecimiento por cada detalle tenido en cuenta en la preparación del lugar. Una vez realizada la consagración del mismo, expresaba en parte de su activar el siguiente sentir: El salmista aquí muestra todo su reconocimiento, su deseo, él toma una decisión, el de venir a buscar la luz y la verdad. Queremos también nosotros llevar el mismo deseo: ¡Yo quiero estar! Será importante siempre antes de venir al “santo monte”, que hablemos con nuestro Padre y le volquemos todas nuestras preocupaciones e incluso enojos. Queremos contarle todo lo que nos pasa, para que saquemos del corazón esa carga y Él pueda entrar en nosotros. Entonces iremos acercándonos de a poco al monte. ¡Tomémonos todo el tiempo necesario antes del Servicio Divino, para descargar todo!
Cada vez que venimos queremos crecer, y crecer es cambiar. En cada Servicio Divino debemos proponernos cambiar algo. ¡Esforcémonos, aunque nos cueste! Para crecer debemos reconocer también nuestros errores. Queremos perseverar en la oración, rogando por quienes no pudieron venir. Que todos puedan sentir el perfume del amor. ¿Se percibirá ese perfume cada vez que nos encontramos con alguien?
Finalizado el Servicio Divino, junto al Evangelista de Distrito Mario Girardi y siervos del lugar, saludó a cada uno de los presentes.

En iglesia Coronel Suárez 2: ayuda al prójimo, de corazón
Esta iglesia integra el mismo “Distrito Nº 54”. Aquí ofició bajo la palabra de Mateo 25:40: “Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis”. En parte de su activar el Apóstol de Distrito expresaba: Dios nos está invitando que demos de su amor al prójimo. Él nos ha dado como enseñanza amar al prójimo como a nosotros mismos. Y amar al prójimo es servirle. Y no se trata de lo que digamos, sino de lo que hagamos. Tenemos posibilidad todos los días para ayudar, y en ambos sentidos, en lo material y en lo espiritual. Aquel que está necesitado está esperando ayuda, y si yo estoy en condiciones de ayudar, ¿por qué no hacerlo? No sirvamos al prójimo por obligación, sino de corazón. Y lo que hagamos, hagámoslo en silencio, sin publicarlo ante los demás.
Queremos compartir la riqueza que hemos recibido, y rico es aquel que más da no el que más tiene. Y no juzguemos a aquel que sufre, porque a veces cometemos ese error. Vemos un niño en la calle y tal vez decimos “¿dónde estarán sus padres?” No importan dónde están, tal vez necesite algo y yo lo pueda ayudar. Porque el amor es comportamiento. El amor se manifiesta en nuestra actitud y en nuestro comportamiento. Que podamos aceptar al forastero, al extraño, al que piensa diferente de nosotros. No vaya a ser cosa que el forastero lleve el sentir de Cristo y yo no. Si Dios ama al que yo veo diferente, ¿por qué no lo voy amar yo? Sin duda que esta palabra nos lleva a la reflexión y todos tenemos mucho qué hacer en este aspecto.

Al día siguiente, el Apóstol de Distrito ofició aun en la ciudad de Sierra de la Ventana (sobre el cual informamos en un siguiente artículo).

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