Congregados en su nombre

Domingo 20/01/2019

En la provincia argentina de Entre Ríos, dos comunidades recibieron la visita del Apóstol Zanotti: Nogoyá y Rosario del Tala. Reseñamos brevemente lo vivido.


“Desde la localidad de Nogoyá, provincia de Entre Ríos, a 400 km de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, queremos compartir con todos nuestros hermanos la hermosa experiencia que hemos vivido el sábado 19 de enero de 2019”. Con estas primeras palabras dan introducción a un resumen del Servicio Divino que tuvo lugar en esta comunidad perteneciente al distrito 2, bajo la atención del Evangelista de Distrito Riveira. El Apóstol Gerardo Zanotti fue acompañado por él y también por el Primer Pastor Valdez. El desarrollo de la prédica tuvo como base el texto bíblico de Mateo 18: 20, que dice: “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. En el marco de esta hora se pudo celebrar además un acto de Santo Sellamiento.
El escrito culmina con las siguientes palabras: “Queremos finalizar contándoles que lo que vivimos fue una hermosa fiesta celestial brindada para nuestro amado Padre”.

Congregados, también en Rosario del Tala
Con la expresión “Jesús está en medio de su Iglesia, que no es el edificio sino todos nosotros”, el Apóstol Zanotti daba inicio el domingo 20 de enero al Servicio Divino con Santo Sellamiento en la comunidad Rosario del Tala (Entre Ríos). El mismo se desarrolló también bajo el texto de Mateo 18:20.
Esta comunidad se caracteriza por la gran cantidad de niños que concurren. Ese domingo había también algunos invitados: dos Pastores y dos maestras habían estado recorriendo las embarradas calles de los distintos barrios llevando invitaciones y dando testimonio. De ese modo, algunos por primera vez tomaban contacto con la Iglesia. El total de congregados fue de 64. También acompañó el Evangelista de Distrito Luciano Frisardi y el Pastor Mariano Rodríguez. Por otra parte, del emotivo acto de Santo Sellamiento participaron diez fieles. El Apóstol expresaba en un momento: “Dios nos da dones para que los repartamos”. Así lo asume la comunidad de Rosario del Tala, sembrando la simiente para que a tiempo y hora Dios deje fluir los resultados. Con alegría pudieron todos despedirse del Apóstol y portadores de ministerio allí presentes.

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