“Cuidar nuestra fe”

El domingo 14 de noviembre de 2021, el Apóstol de Distrito Enrique Minio visitó la iglesia Villa Bosch (Argentina). Acompañado por el Apóstol Guillermo Canessa y el Obispo Marcelo Boggio, realizó allí un Servicio Divino para 109 invitados.

Villa Bosch es una localidad ubicada al noroeste del Gran Buenos Aires, distante unos 45 minutos de la capital del país. Desde 1956 funciona allí la comunidad nuevoapostólica que lleva el mismo nombre que la ciudad. En el Servicio Divino de inauguración habían estado presentes los Apóstoles Rufenacht y Glessmann.

Cuidar y crecer en la fe

El texto bíblico que el Apóstol de Distrito Minio tomó para el desarrollo de la prédica fue la palabra del día, Hebreos 4: 1: “Temamos, pues, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado.”

“Debemos preparar nuestra alma para el día que Cristo venga a buscarnos. Es decir, lograr que el viejo ser vaya decreciendo y que la nueva criatura pueda desarrollarse cada vez más. Queremos cuidar nuestra fe, porque lo que Dios ha prometido, será una hermosa realidad”, exhortó el Apóstol de Distrito a la comunidad. Por su parte, el Apóstol Canessa agregó: “Hoy hemos recibido un mensaje de esperanza. Crecer en nuestra fe es algo fundamental porque, aunque sea un regalo de Dios, creer es nuestra decisión”.

Luego de celebrarse la Santa Cena, este Sacramento fue donado también a las almas del más allá. “El alma y el espíritu no mueren, todos lo que están bautizados y así lo desean, ahora pueden participar”, expresaba el Apóstol de Distrito.

Un domingo color rubí…

En el marco de la hora celebrada, el Apóstol de Distrito efectuó un acto de bendición que trajo mucha alegría a toda la comunidad y en especial al Obispo Marcelo Boggio y Sandra, su esposa que recibieron la bendición por sus 40 años de matrimonio, festejo conocido también como “bodas de rubí”.

El Obispo había sido durante muchos años el Pastor dirigente en la iglesia Villa Bosch. Sandra, por su parte, colaboró en diversas tareas dentro de esta comunidad y también sus hijos crecieron allí. Uno de los momentos más emotivos de la mañana llegó cuando fue leída una breve reseña descripta con los dichos de los nietos de la pareja, sobre lo vivido junto a ellos.

“Junto a los Apóstoles, hermanos, hermanas e invitados, hemos vivimos una hora de gran bendición”, expresaron los siervos de Villa Bosch una vez finalizado el Servicio Divino.