Ser como Cristo

El sábado 25 de octubre, el Apóstol de Distrito Enrique Minio, acompañado por Apóstoles y Obispos, presidió un Servicio Divino para la juventud en la Iglesia Central Buenos Aires (Argentina). “Podemos y queremos llegar a ser como Cristo”, fue la premisa que guio el servir.

Los jóvenes de la INA Sud América fueron invitados a compartir el Servicio Divino mensual para la juventud. Esta vez, unos 1500 invitados participaron presencialmente en la Iglesia Central y todos los demás vivieron el encuentro por medio de una transmisión en vivo en las comunidades.

El Apóstol de Distrito Enrique Minio presidió la hora, acompañado por Apóstoles y Obispos de los países de habla hispana de nuestra área.

A su imagen

Para esta especial ocasión, la cita bíblica utilizada fue Romanos 8:29: “Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos”.

“Amada juventud, yo no sé todo lo que pasa en vuestro corazón. Pero Dios sí lo sabe. Él nos ama y quiere darnos todo lo necesario para que podamos alcanzar la meta”, fue el primer sentir que expresó el Apóstol de Distrito Minio, antes de avanzar con el desarrollo de la prédica.

Decidirnos por la salvación

Luego, con relación al texto bíblico, explicó que Dios nos predestinó para llegar a ser semejantes a Cristo. Sin embargo, esto no significa que nuestra vida ya esté predeterminada o que no podamos hacer nada para cambiarla. Lo que el Padre celestial desea decirnos es que nos eligió para que podamos ser como Cristo. Depende de nosotros aceptar ese llamado y decidirnos por la salvación.

Confianza, sabiduría, fortaleza y amor

A continuación, el Apóstol de Distrito mencionó algunas características de Cristo que podemos alcanzar si dejamos que nos ayude. Entre ellas destacó la confianza en Dios, la sabiduría, la fortaleza y el amor. “Ser semejante a Cristo es también convertirse en fuente de bendición para otros”, agregó luego. Por otra parte, para llegar a ser como Cristo, ya hoy necesitamos demostrar fe, amor y la misma voluntad para servir que Él tuvo.

Un modelo y una meta en común

Hoy en día, cada vez más personas se definen por sus diferencias. Esto hace crecer las divisiones en la sociedad. “Pero si queremos parecernos a Cristo, vamos a centrarnos en lo que tenemos en común: nuestro modelo y meta. Imitando a Jesús, podremos superar nuestras diferencias y contribuir a la salvación de los demás”, destacó el Apóstol de Distrito.

Participaron del servir el Ayudante Apóstol de Distrito Herman Ernst y el Apóstol Pablo Basso.

Luego del himno final, que en esta ocasión fue entonado por toda la comunidad reunida, el Apóstol de Distrito expresó: “Les agradezco desde lo profundo del corazón por vuestra presencia, aquí y en cada lugar de conexión. Gracias por cada tarea realizada. ¡Que Dios los bendiga!”.

Al finalizar el Servicio Divinos, los jóvenes aprovecharon el encuentro para compartir saludos y fotografías. El amor y la alegría caracterizaron este momento.