Comunión verdadera

El sábado 26 de abril, 262 jóvenes se congregaron en la iglesia Lanús Nº 2 (sur del Gran Buenos Aires) para un Servicio Divino en conjunto.

Igual, pero diferente: esta vez, el Obispo Diego Batista (quien colabora en el área del Apóstol Claudio González) ofició para la juventud en la iglesia Lanús 2, donde se reunieron jóvenes de los Distritos Nº 9 y 10, de Gran Buenos Aires, a cargo del Obispo Juan Carlos Aloy, en el área del Apóstol Pablo Basso.
Hubo muchos preparativos para ese día: portadores de ministerio, colaboradores y jóvenes, pusieron manos a la obra realizando múltiples tareas, entre otros souvenirs e invitaciones con el deseo de llegar a todos: jóvenes concurrentes o no, los más nuevos o los mayores, amigos, parejas, etc. Se trabajó bajo el lema de la jornada de juventud sudamericana en Uruguay: “Unidos somos uno”.
El texto bíblico utilizado para el servir, fue el de 1 Corintios 12: 26: “De manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan”.
Al comenzar, el Obispo Batista expresó su alegría y agradecimiento a Dios por la posibilidad de compartir la hora y por darnos un lugar en su casa.
A continuación, hizo referencia a la palabra comunión y dio un ejemplo: “Si cada órgano de nuestro cuerpo funcionara como quisiera, si no estuvieran unidos y coordinados entre sí dejándose guiar por el cerebro, evidentemente ese cuerpo no andaría bien…” Llevándolo a nuestra vida de fe, podemos decir que “somos el cuerpo de Cristo y, a pesar de ser todos diferentes, deseamos unirnos entre nosotros y con Él”, dijo.
“Utilizando los dones que Dios nos regaló, podemos complementarnos y seguir creciendo”, expresó el Obispo.
Para lograr la comunión verdadera entre nosotros y con Dios, necesitamos aceptarnos como somos, amarnos, perdonarnos, teniendo presente que Dios nos llamó para compartir una eternidad junto a Él. No tomemos atajos que nos parecen más cortos y rápidos, “Dios nos muestra el camino que nos llevará seguros a la meta de nuestra fe”, concluyó.
Seguidamente colaboraron en el servir dos Pastores que colaboran con la juventud en ambos distritos, así como el Obispo Aloy.
Al salir de la iglesia, la alegría manifiesta en el rostro de los participantes, daba cuenta del buen encuentro compartido.