Servimos con amor

El sábado 8 de marzo, el Apóstol de Distrito Enrique Minio presidió un Servicio Divino para colaboradores del área de enseñanza. El encuentro fue transmitido a los seis países de la INA Sudamérica.

“Servimos a nuestros niños con amor”, fue la premisa que impulsó la prédica. El texto bíblico del día fue parte de Juan 21:15: “Apacienta mis corderos”. Acompañaron al Apóstol de Distrito, el Apóstol Claudio González, el Obispo Diego Roma y el Evangelista de Distrito Pablo Pedrol.

Al inicio de la hora, el Apóstol de Distrito expresó el agradecimiento por todas las tareas realizadas. “Colaborar en la enseñanza para niños es algo muy especial, porque para hacerlo primero debe estar el amor en nuestro corazón”, destacó.

A continuación, fueron mencionados algunos aspectos que caracterizan a ese amor. En primer lugar, buscamos desarrollar el vínculo con los niños. Para ello tendremos que conocer lo que sienten, piensan y viven. Solo así podremos comprenderlos, empatizar con ellos y ayudarlos.

Otra cualidad esencial de este amor es la humildad. No podremos comprender a los niños si analizamos sus situaciones desde nuestro propio punto de vista. Para que sientan que pueden contar con nosotros, es imprescindible colocarnos a su altura. “Queremos dedicar tiempo para conocer a cada uno de los niños”, exhortó el Apóstol de Distrito.

Por último, si damos lugar al amor en el corazón, en paralelo se desarrollará en nosotros la paciencia. “Cuando sintamos que estamos por perder la paz, permitamos que el don del Espíritu Santo nos guíe y elijamos siempre el camino del dominio propio, del perdón y de la reconciliación”, señaló el siervo. Realizaron aportes a la prédica, el Apóstol González, el Obispo Roma y el Evangelista de Distrito Pedrol.

A modo de cierre, el Apóstol de Distrito concluyó: “Es un enorme desafío el que Dios nos propone. ¡No nos detengamos en los resultados y coloquemos siempre lo mejor de nuestro corazón!”.