Fin de semana en Córdoba: Villa Carlos Paz y La Calera

El 4 y 5 de julio de 2015 el Ayudante Apóstol de Distrito Enrique Minio llegó a la provincia de Córdoba, Argentina, para realizar dos Servicios Divinos. El primero fue en Villa Carlos Paz (distrito 08/2), el sábado 4. Al día siguiente oficiaría en La Calera (distrito 08/1). Los Evangelistas Herrera, Romero y Heidemann acompañaron la actividad.

Villa Carlos Paz. Participaron 148 creyentes de las comunidades de Villa Carlos Paz y de Cosquín. El texto bíblico fue Hechos 7:59-60: “Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió”.
Entre otros conceptos el Ayudante Apóstol de Distrito Minio expresaba: ¿Cuándo tenemos que perdonar? Cuando el hecho ha tomado dominio de nuestra vida. Cuando nos enojamos, perdemos el dominio propio y la situación comienza a manejar el rumbo de nuestra vida, nuestros sentimientos. Dios quiere llevarnos a que el Espíritu Santo domine nuestra vida. Perdonar significa renunciar a la razón y aceptar la justicia divina; que sea Dios el que decida y juzgue. Y cuando uno perdona, vuelve a tomar el control de la propia vida. ¿Cómo logro perdonar? Rogando a Dios comprensión. Que yo perdone al otro, abre un camino de reconciliación; que pueda perdonar es una cuestión de decisión y para ello tenemos que pedir ayuda al Padre.
Colaboraron en el servir los Evangelistas Herrera, Romero y Heidemann.

La Calera. Esta ciudad se ubica en el departamento Colón, a sólo 19 km de Córdoba capital. Los preparativos para el Servicio Divino se realizaron con mucha anticipación y en conjunto con los hermanos de la comunidad invitada: Unquillo. Los jóvenes se encargaron de realizar los souvenires y hubo dos ensayos de con los coros de ambas comunidades en conjunto. Muchos colaboraron en la tarea de la limpieza el día sábado, también las hermanas realizaron un hermoso arreglo floral y todo fue acompañado de muchos ruegos.
El Ayudante Apóstol de Distrito Minio utilizó el texto bíblico de Colosenses 1:21-23: “Y a vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él; si en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y sin moveros de la esperanza del evangelio que habéis oído, el cual se predica en toda la creación que está debajo del cielo; del cual yo Pablo fui hecho ministro”.
Como cristianos llevamos la certeza de que nuestra alma es inmortal y añoramos tener vida eterna: la vida eterna se refiere a una eterna comunión con Dios. Cuando pensamos en los amados que han partido a la eternidad, está el dolor de no compartir junto a ellos nuestra vida material. Pero el Padre celestial nos ayuda y consuela, tanto a nosotros como a quienes se encuentran en la eternidad. Y el consuelo es que Jesús ha de volver.
Participaron en total 113 fieles. Colaboraron en el servir los Evangelistas de Distrito Heidemann y Romero y los Primeros Pastores Stabile y Pena.