Córdoba: Actividad del Apóstol de Distrito

Viernes 06/03/2015

El Apóstol de Distrito llegó a Córdoba capital el viernes 20 de febrero de 2015 en horas de la tarde. Tenía prevista una reunión para portadores de ministerio en la iglesia Alto Alberdi y dos Servicios Divinos: el sábado 21 en la iglesia Río Cuarto y el domingo 22 en Río Tercero.


A las 20.00 hs. se congregaron los siervos de los tres distritos (08/1, 08/2 y 08/3) en la iglesia Alto Alberdi. Con un total de 48 participantes el Apóstol de Distrito basó su servir en Éxodo 4: 12: “Ahora pues, ve, y yo estaré con tu boca, y te enseñaré lo que hayas de hablar”.
El sábado en horas de la mañana el Apóstol de Distrito emprendió viaje a la ciudad de Río Cuarto, en el sur de la provincia de Córdoba, a 220 km de la capital. Estaba previsto un Servicio Divino por la tarde, del cual participaron un total de 50 fieles. Aquí el texto bíblico fue Mateo 13: 1-3: “Aquel día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar. Y se le juntó mucha gente; y entrando él en la barca, se sentó, y toda la gente estaba en la playa. Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar”. Avanzando algunos versículos, el Apóstol de Distrito desarrolló la parábola del tesoro escondido (Mateo 13: 44) explicando que el Señor no podía decir: “El reino de los cielos es tal cosa”, pues no es posible compararlo con nada de lo que conocemos. Dios hoy nos habla a nosotros y nos pregunta: ¿Estás dispuesto a hacer algo semejante? ¿Lo harías sólo porque me amas¬?

El domingo el destino sería Río Tercero, esta vez recorriendo 130 km para servir a los hijos de Dios que se habían congregado en una pequeña comunidad colmada con 62 fieles. El Apóstol de Distrito basó su servir en la palabra de Marcos 10, parte del versículo 51: “Respondiendo Jesús, le dijo: ¿Qué quieres que te haga?”. Expresaba el Apóstol de Distrito que existe un ámbito íntimo de cada persona en el cual Dios se encuentra con cada uno. Es el lugar que solo conoce cada uno y Dios. A su vez, Jesús siempre se acerca a nosotros y nos llama para ayudarnos (así como lo hizo con el mendigo Bartimeo, del que habla el pasaje bíblico citado). Y lo que produce el milagro es la fe.

Culminó el fin de semana dejando mucha alegría en el corazón de los fieles de ambas comunidades, en las cuales era la primera vez que activaba un Apóstol de Distrito.

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