Domingo 14/01/2018
El 13 y 14 de enero fue un fin de semana especial en la ciudad de Mar del Plata (ubicada en la costa atlántica de la provincia de Buenos Aires). Los fieles nuevoapostólicos esperaban con alegría compartir un Servicio Divino junto al Apóstol de Distrito Enrique Minio, quien oficiaría en las iglesias Mar del Plata Nº 3 y Mar del Plata Nº 2.
El sábado 13 la visita comenzó en Mar del Plata Nº 3, donde también acompañaron el Evangelista de Distrito Baglioni, los Primeros Pastores Benavídez y Amoroso y Pastores dirigentes de las comunidades Miramar, Balcarce, Mar del Plata Nº 1, Necochea, Santa Clara y Coronel Vidal, que integran el distrito. Asistieron 171 fieles, que disfrutaron del servir bajo el texto bíblico de Salmos 122: 1: “Yo me alegré con los que decían: A la casa de Jehová iremos”. Refiriéndose a este texto, el Apóstol de Distrito explicaba que dicho salmo era un canto del pueblo que iba con alegría hacia Jerusalén. También hoy debemos sentirnos alegres, pues estamos caminando hacia la Jerusalén celestial. En relación al lema dado por el Apóstol Mayor para este año, tenemos una gran motivación para quedar "fieles a Cristo": cuando lleguemos a ese lugar seremos liberados totalmente del pecado, de la tentación, de las debilidades humanas; además, tenemos la esperanza de reencontrarnos con nuestros amados que ya partieron al más allá. Lo importante es que interiormente vayamos cambiando a la imagen de Jesús, sentir nostalgia y anhelo por alcanzar la Jerusalén celestial.
Colaboró en el servir el Evangelista de Distrito Baglioni.
Mar del Plata N° 2
Aquí recibieron la visita del Apóstol de Distrito, el domingo 14 de enero, un total de 191 fieles. La prédica tuvo como base el pasaje bíblico de Isaías 48:17: “Así ha dicho Jehová, Redentor tuyo, el Santo de Israel: Yo soy Jehová Dios tuyo, que te enseña provechosamente, que te encamina por el camino que debes seguir”.
Primeramente, recordó la enseñanza para este año 2018: Quedar fieles a Cristo, con los cuatro parámetros: siguiendo su ejemplo, siendo constantes en el amor, sirviéndolo fielmente y cumpliendo nuestras promesas.
Ya en el desarrollo de la palabra del día, mencionó que Dios muestra el camino hacia la salvación. Él nos enseña y nosotros queremos aprender: primero, aprender a escuchar; predisponer el corazón y no distraernos. Luego, aprender a comprender el mensaje. Después, aceptar la palabra. Y por último, aplicarla. Cada Servicio Divino es un proceso de aprendizaje, que nos enseña a cambiar para poder hacerlo mejor. Luego es una decisión de cada uno y quisiéramos decidirnos, pero haciéndolo no por obligación sino por amor a Dios.
También aquí acompañó en el servir el Evangelista de Distrito Baglioni y el Primer Pastor Benavídez y fue celebrada además la Santa Cena para los difuntos. Alegró asimismo la presencia del Ayudante Apóstol de Distrito e.d. Carlos Granja.