Estanzuela celebra en comunidad

Domingo 11/03/2018

Los hermanos y hermanas de la localidad de Estanzuela (distrito 1, Uruguay) celebraron junto al Obispo Edgardo Méndez nada menos que 75 años desde la apertura de su comunidad. Reseñamos el Servicio Divino conmemorativo del domingo 11 de marzo de 2018.


La Estanzuela es una zona rural del departamento de Colonia a escasos 30 kilómetros de la capital departamental. Esta pequeña comunidad está conformada por miembros que en su mayoría se dedican a la actividad agropecuaria.

Los inicios
Para encontrar los primeros indicios de esta comunidad debemos remontarnos a la década de 1940, cuando un habitante de la zona, Juan Dadalt, recibió testimonio por parte de un peón rural, Amado Benech, proveniente de Colonia Valdense. Curiosamente fue en una peluquería donde Dadalt escuchó por primera vez hablar de los Apóstoles y fue invitado a un Servicio Divino en la vecina localidad de Riachuelo. Recorrió 15 kilómetros a caballo para poder estar. Al tiempo, junto a su familia se sumaron otras y así conformaron la comunidad de Estanzuela, cuya apertura fue en ocasión de un Servicio Divino con Santo Sellamiento del 22 de julio de 1943, realizado por el Apóstol Eduardo Gatner.

Aniversario
Pasaron 75 años desde esos comienzos y ahora la comunidad (73 hermanos y hermanas) se reunía para celebrarlo. El texto bíblico para esta ocasión fue Hebreos 4:13: “Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta”.
En primer lugar, el Obispo Méndez expresó el agradecimiento a nuestros mayores que nos han dejado un legado de fe y de humildad, quienes por amor a Dios, quizás no entendiendo todo, enfrentando dificultades, a veces burlas o críticas, buscaron a Jesucristo. Y también agradecimiento al Señor que ha sido el sustento en todos los tiempos.
Colaboraron en el servir el Anciano de Distrito Enrique Rizzardini y el Evangelista de Distrito Aldo Mignone quienes, junto al Obispo, una vez finalizada la hora saludaron a la comunidad.
Luego, todos compartieron un refrigerio y una exposición fotográfica que registraba los distintos momentos vividos por esta comunidad. Antes de irse, cada participante recibió un suvenir especialmente preparado para la ocasión.

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