Buenas obras: un reflejo de la fe

El sábado 6 de enero de 2018 se reunieron las comunidades del distrito 14 en la iglesia La Plata Nº 2 (provincia de Buenos Aires), bajo el servir del Apóstol de Distrito Enrique Minio. Uno de los motivos de la visita sería el pase a descanso ministerial del Evangelista de Distrito Jorge Nakane. Más de 300 fieles compartieron una hora plena de sentimientos.

La Plata es la capital de la provincia de Buenos Aires. La Plata Nº2 se ubica cerca de uno de los ingresos a la ciudad. Fue inaugurada en el año 1985. El Apóstol de Distrito Minio estuvo aquí acompañado por los Apóstoles Gerardo Zanotti y Guillermo Canessa, más los dirigentes de distrito y portadores de ministerio de las comunidades invitadas: Los Hornos Nº1, Los Hornos Nº2, Verónica y Abasto.
Una iglesia colmada por 322 hermanos y hermanas aguardaba el comienzo de la hora. Se utilizó incluso un salón anexo con que cuenta la comunidad, con un proyector que transmitía por imagen y sonido lo que sucedía en la nave central.
El Servicio Divino comenzó a las 19 horas y la prédica se basó en el texto bíblico de Tito 2: 14, que dice: “Quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras”. El Apóstol de Distrito, luego de compartir los saludos del Apóstol Mayor, fue desarrollando la palabra, mencionando que el eje principal del mes de enero era el camino de la salvación y que este camino es Cristo. En eso se basa nuestra fe. También expresaba que es la fe en Cristo la que nos permite alcanzar la salvación, no nuestras obras ni méritos. Pero nuestras obras sí son un reflejo de nuestra fe. Deseamos que nuestras “buenas obras” sean un reflejo de la fe, y por ello queremos profundizar en nuestra fe. Nuestro modelo es Cristo; queremos amar, perdonar, comprender, pensar, sentir y obrar como lo hacía Él. Y también queremos servir a Dios, en ese mismo sentir.
Compartieron el altar también los Apóstoles allí presentes y el Evangelista de Distrito Nakane. Luego de celebrarse la Santa Cena, el Apóstol de Distrito procedió a colocarlo en estado de descanso ministerial, agradeciéndole por los 47 años como colaborador en la Obra de Dios. Asimismo, fue ordenado en el ministerio de Primer Pastor el hasta entonces Pastor Alejandro Curcio, de la comunidad La Plata Nº2. El coro dedicó un himno a cada uno.
Fue una hora muy especial para todos. Y al ser un Servicio Divino en conjunto, a la salida podía verse también la alegría por los reencuentros entre hermanos y hermanas de las diversas comunidades invitadas.